Los aportes de la gente venida desde la milenaria China ha constituido una de las contribuciones más significativas para nuestra multicultural sociedad peruana. Como es sabido alrededor de 85,000 chinos llegaron en condiciones de semiesclavitud a las costas del Perú en el siglo XIX.
Estos heroicos trabajadores chinos venían huyendo de la miseria y la opresión.
Habían sido estafados de la manera más vil por empresarios “enganchadores de mano de obra” que, ante la escasez de braceros en las medievales plantaciones de algodón y caña de azúcar de la costa peruana y en las islas donde se extraía guano, no encontraron mejor salida que importar en condición de bestias de trabajo a miles de campesinos chinos a quienes se prometió condiciones de vida y de trabajo que jamás se cumplieron. Todo esto siempre con la complicidad y bendición respectivamente de los gobernantes peruanos y de la santa Iglesia Católica.
La escasez de mano de obra, como se sabe, se originó por la abolición de la ESCLAVITUD de los descendientes de africanos. Los terratenientes peruanos y los concesionarios de la explotación de las islas guaneras no estaba dispuestos a contratar, capitalistamente, a jornaleros asalariados, dado que se habían acostumbrado a los beneficios de la mano de obra esclava. Los chinos llegaron a trabajar en condiciones de semi-esclavitud, casi sin ningún derecho a nada.
(OBSERVESE LAS CADENAS EN LOS TOBILLOS DE ESTE TRABAJADOR CHINO)
En un largo y difícil proceso de adaptación, las sucesivas generaciones de descendientes de chinos quedaron plenamente integrados a nuestra desintegrada sociedad, formando parte de ese variopinto mosaico cultural que es el Perú. Los descendientes de chinos han dado invalorables aportes al país en los más diversos campos de la actividad humana así como descollantes personalidades.
Por otro lado es necesario precisar que rechazamos de plano cualquier expresión de chauvinismo y patrioterismo que es parte de una ideología burguesa y reaccionaria..
Precisado esto, tenemos la ingrata tarea de mencionar a unos conocidos integrantes de la colectividad china peruana, que han tenido una espectacular trayectoria en el campo empresarial: la familia Wong.
Es bastante conocido el progreso empresarial de esta familia: de la clásica “bodega del chino de la esquina” que estableció el padre, el extinto Erasmo Wong, la siguiente generación con mucho esfuerzo y derrochando gran talento para los negocios, pasó a tener una impresionante cadena de supermercados, digna de un país del primer mundo, constituyéndose en uno de los grupos económicos más importantes del país.
Hasta allí todo bien.
El problema surge conque los hermanos Wong, cabezas de la moderna “CORPORACION E.WONG” tuvieron como parte central de su estrategia de mercadotecnia el diferenciarse de sus competidores con el mensaje de LA PERUANIDAD, de SU PERUANIDAD por encima de todo.
Durante años ese fue su gran caballo de batalla.
Permanentemente apelaban en sus mensajes, de la manera más explícita, a este recurso.
Utilizaban los símbolos patrios y sus colores como parte intrínseca de la cultura de su organización.
Esto se manifestaba de manera especial durante el mes de Julio. Todo el decorado de las tiendas, los escaparates, los uniformes de los empleados y cajeras tenía como tema central LA PERUANIDAD de la Corporación E. Wong y, naturalmente, de la familia que estaba detrás.
En las competencias deportivas donde actuaba alguna representación peruana se las arreglaban para decorar los estadios, repartir globos, serpentinas, banderitas con los colores nacionales.
Todos los años, desde inicios de los 90´s, en los días centrales de las fiestas patrias organizaban “el Corso Patriótico de Wong” en las calles de Miraflores.
Poco a poco ( sin que casi nadie se percatase) empezaron a denominarlo “el tradicional corso patriótico de Wong ” en el cual comprometían además la activa participación de diversas entidades públicas y privadas.
Nadie más peruanazos pues que los hermanitos Wong.
¡Y vaya si les dio resultado la estrategia comunicacional!
Si la papa, el ají, el ceviche, la yuca y el pisco son nuestros “productos de bandera”, la marca “Wong” era una especie de “marca de bandera” y la empresa Wong era una especie de “empresa de bandera.” Así se habian posicionado en la mente del consumidor Así habían "fidelizado" al cliente.
La cuestión es que todo este cuentazo de la “peruanidad”, del “patriotismo”, de los “sagrados colores de la patria” les sirvió, entre otras cosas, a los hermanitos Wong para ENGORDAR AL MAXIMO AL CERDO.
A golpe de himnos nacionales, escarapelas y escudos, bosques de banderas, marineras, huaynos y Arriba Perú con P de Patria, el CERDO ENGORDABA, ENGORDABA Y NO DEJABA DE ENGORDAR.
Engordaron tanto al chancho que en varias ocasiones se rumoreaba de manera insistente que grandes corporaciones internacionales pretendían comprar la marca y la cadena de tiendas.
Cuando esto ocurría invariablemente aparecía alguno de los hermanitos Wong o algún vocero de ellos y rechazaba indignado "a nombre de la familia" tales propuestas indecentes, dando entender algo así como que “…así como el Perú no se vende, tampoco se vende Wong que es parte del patrimonio nacional….” (ESTE VIDEO ES DE ANTOLOGIA)
La verdad de la milanesa era que la banda de los cuatro hermanitos pendencieros aguardaban las “condiciones óptimas” para vender el bien cebado cerdito, esa parte del “patrimonio nacional” del que eran propietarios.
La ocasión óptima para nuestros patriotas y nacionalistas llegó a fines del 2,007. Evaluaron que nunca iba a existir una ocasión mejor para vender. El precio había llegado a su límite máximo.
La P de Patria se transformó en P de Plata, así la idea de un barbado filósofo alemán de que "..el burgués por Etica tiene sólo la ética de la bolsa" se materializó por enésima vez.
¿A quién le vendieron nuestros 4 tenderos patriotas nuestra "marca de bandera", la "empresa de bandera" , el “patrimonio de la nación” ?
¡! A una corporación chilena ¡!
!! A una corporación de un país que aparece como “enemigo” del Perú en el imaginario de la población!!
!! A una corporación de un país que invadió el territorio peruano en tres ocasiones y se anexó dos provincias peruanas y mantuvo durante medio siglo cautiva a otra!!
!!A una corporación de un país con el cual hay un litigio pendiente por límites marítimos !!
!! A una corporación de un país que desarrolla una frenética carrera armamentista cuyo objetivo primario es utilizarlo contra el Perú !!.
!! A una corporación cuyas utilidades tributan para beneficio de las fuerzas armadas chilenas!!
¡Ahhh…sino serán unos pendencieros de siete suelas estos hermanitos Wong!!
CENCOSUD se llama la corporación chilena que compró el 98 % de la Corporación E.Wong.
El 2 % quedó en manos de los hermanitos Wong, a uno de los cuales se les dio un empleo como "presidente ejecutivo" o algo por allí, que consiste en esencia “mantener buenas relaciones con las autoridades” y las “fuerzas vivas” del país.....! y vaya si lo hace!
Lo más aberrante y ridículo de todo este desaguisado es que el actual Ministro de Defensa, en consecuencia la autoridad última para los institutos militares del país, celebró por todo lo alto el gol chileno en el 2,007.
¡!Usó el Palacio de Gobierno, el mismo que fuera ocupado por el tristemente célebre criminal de guerra chileno Patricio Lynch, para anunciar al mundo y por todo lo alto “la magnífica operación de los hermanos Wong que significa la confianza de los inversionistas extranjeros en el Perú de Alan García”¡!
Eso fue en noviembre del 2,007.
La expectativa de algunos era si las tiendas de la corporación, propiedad de chilenos, iba a seguir con la monserga de "LA PERUANIDAD", del "PATRIOTISMO" y esas cosas que hicieron multimillonarios a los Wong.
En efecto y para mayor sarcasmo siguieron con esto.
El año 2,008 en Julio organizaron el "Tradicional Corso Patriotico de Wong" con la entusiasta ayuda de las autoridades municipales de la heroica ciudad de Miraflores, la que fuese incendiada y saqueada por el invasor chileno en enero de 1,881.
En estos días hemos visto por allí los preparativos y aprestos "patrioticos" de la corporación chilena en las calles céntricas de Miraflores. Hay una gran banderola con una frase que se le atribuye al mariscal Andres Avelino Cáceres. "Contra el Perú no existe razón" o algo así.
No tengo dudas que el actual Ministro de Defensa, si la empresa chilena le hubiese solicitado las bandas de músicos de los institutos armados para animar el circo de inmediato y de lo más solícito se hubiese allanado y tomado el teléfono para impartir la orden.
Felizmente no se realizará este 2,009 ese, por obvias razones ignominoso " tradicional corso patriótico de Wong."
Pero no se llevará a cabo por algún resto de dignidad o de autoestima de alguna de nuestras autoridades gubernamentales o ediles.
No se llevará a cabo este 2,009 gracias a la "gripe porcina".
!Felices Fiestas Patrias!.
1 comentario:
Estos chinos delincuentes, con el perdón de los que son honestos, hace tiempo que usando el poder político y bajo la monserga del patriotismo, han engordado su billetera. Entre otros tienen el haber recurrido como Julio Favre a los siniestros servicios del Grupo Colina para deshacerse de personas incómodas a sus intereses. Debe investigarse YA.........No todos los chinos, apristas y fujimoristas son honestos
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